Cuando mis hijos eran pequeñitos cada cosa de la casa me parecía peligrosa para ellos. imagínate las peligrosas de verdad, como alfileres, agujas, piezas pequeñas, cuchillos, cables...
Me angustiaba el cajón de los cubiertos de la cocina especialmente. Pensaba que meterían la manita y se cortarían con el filo de los cuchillos, así que decidí quitarlos de su alcance.
Es un imán, bastante potente que con dos taladros o pegado con silicona, puede fijar a la pared de la cocina y poner en él los cuchillos más cortantes. En la pared, con la mesa o encimera por medio, será muy difícil que los chiquitines se hagan daño.
No es demasiado barato (unos 15 o 20 euros) pero no se gasta nunca, y, como veis, sujeta cuchillos de grandes dimensiones y peso. Yo lo encontré en "Ikea" pero estoy segura de que lo venden en más sitios y sino, un imán que podréis encontrar en una buena ferretería.
Un saludo de Manuela.
viernes, 11 de enero de 2008
Los cuchillos: Un peligro cuando hay niños.
Publicado por Manuela (Natacha) en 21:50
Etiquetas: Trucos para casa
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