sábado, 22 de diciembre de 2007

Imitaciones: figuras que parecen porcelana blanca (parte II).

Para hacer una buena imitación con una figura de escayola o marmolina (recomiendo siempre la marmolina, es un poco más cara, pero la calidad es muy superior) son necesarios muy pocos productos. Es muy fácil y el resultado es espectacular.

En primer lugar debes pintar con pintura al agua de color blanco. Cuando haya pasado una hora aplicar otra mano de esmalte sintético (como titanlux o similar) blanco, o si preferís un barniz brillante incoloro.


Dejar secar dos o tres días. Entonces aplicar betún de Judea, un poquito rebajado con aguarrás. Limpiarlo enseguida de las partes salientes y lisas, con un paño humedecido en aguarrás.
Utilizar guantes para este trabajo y recordar que el aguarrás es muy tóxico y no lo deben usar los niños.

Como acabado final se puede espolvorear con talco. Limpiar, al menos, 24 horas después.

Si se desea una pátina más amarilla (que queda mejor para figuras romanas o griegas) debes utilizar en vez del betún de judea, goma-laca de color. Aplica y elimínala en fresco. sobre todas las partes salientes. Así conseguirás que los entrantes y recovecos queden con esa tonalidad amarillenta tan característica de estas figuras.

Cualquiera de los dos acabados quedan muy bien. A mi personalmente me gusta más el Betún de judea por las tonalidades más cálidas que da.
También se puede dejar simplemente blanco brillante. Sin patinar. Quedará como la imagen de la izquierda.
Ya me contaréis cómo os quedó.

Un saludo de Manuela.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Cubitos de hielo de colores (para niños).

Materiales:

- Agua
- Bandeja para hacer cubitos de hielo
- Colorantes alimentarios (se encuentran en cualquier hipermercado, en la zona de flanes, postres, perlas de chocolate,etc.)
- Congelador.
Deja a los niños que hagan estos cubitos para cualquiera de las cenas o comidas especiales de estas fiestas.
En una jarra con agua, echar 8 ó 10 gotas del colorante elegido y viértelo en la cubitera. No tengas miedo con el color. No se quedará pegado en tu cubitera. Cuando saques los cubitos quedará limpio y si acaso con enjuagar con un poco de agua saldrá cualquier resto que quede.
Los vasos de agua que tomen los niños con estos cubitos de hielo quedarán preciosos cuando éste se empiece a derretir y será un motivo más de novedad en estos días tan especiales.
Otra idea muy fácil es poner en cada cubito (antes de congelar) una hojita de hierbabuena. Estos cubitos añadidos a algunos licores, le dan un gusto muy especial.





Aprovecho la ocasión para felicitar las fiestas a todas las personas, que, en estas pocas semanas, me han regalado sus comentarios, sus visitas y su atención tan amablemente. Felíz año 2008 para todos.
Es un deseo de Manuela.

sábado, 8 de diciembre de 2007

Como cortar tela para una mesa redonda.

Vamos a ver cómo se corta un mantel o una falda para una mesa camilla.

Lo primero que necesitamos es una cinta métrica. En el caso del mantel y de la falda hay que medir el diámetro de la mesa (A).
Vamos a suponer que es una mesa de 90 cm. de tablero redondo. Añadimos 40 cm. en el caso del mantel, que será la tela que caiga alrededor mas el dobladillo.(A + 45 cm.)
Si es una faldilla hasta el suelo tenéis que medir la altura de la mesa (B). Vamos a suponer que mide desde el borde del tablero hasta el suelo 70 cm. Bueno, pues hay que sumar 70+45 (la altura más la mitad del diámetro del tablero) (mitad de A + B) tenemos ahora un total de 115 cm.
Necesitas comprar una tela que tenga, como mínimo 2,40 cm. de lado (por los cuatro lados).
Es decir, hemos medido desde el centro del tablero (45 cm.) hasta el suelo (70 cm.) 115 cm. Ahora necesitamos el doble que son 2 m 30 cm y añadimos 10 cm. más para los dobladillos.

Coged la tela que mide 2 metros y 40 centímetros y dobladla una vez por la mitad y una segunda vez por la mitad también. Hasta obtener un cuadrado perfecto. Colocad la tela sobre una superficie plana o en el suelo bien estirada y con los dobleces hechos.
Ahora medid desde el pico cerrado hacia la parte abierta, 1 metro y 20 cm. Sin mover la cinta de ese lugar, ir describiendo un redondel por la parte de abajo y marcando con un lápiz a 1 metro 20 cm., al llegar al otro lado de la tela doblada tendréis la marca por donde cortar. Al extenderlo será un círculo perfecto a la medida de tu mesa. Ahora hay que hacer los ajustes con la tela puesta sobre la mesa.
Marca el trozo que te sobre con un hilván (con hilo y puntadas grandes) y dobla la tela sobre sí misma dos veces por todo el borde. Necesitarás más o menos 5 cm. para el dobladillo. No lo hagas muy ancho. Al ser redondo quedará mejor si es estrechito.
Puedes poner una cinta de pasamanería o una puntilla cosida la borde para darle otro aire a la falda de tu mesa.
Si se trata de un mantel deberás medir el contorno o diámetro de la mesa y añadir 40 cm. como mínimo para la caída. En este caso te recomiendo que remates la tela con un bies a tono o haciendo contraste. Es fácil de coser y queda la costura muy limpia, además te ahorras hacer el dobladillo de la tela.

Utiliza el mismo remate para las servilletas, aunque si es un mantel para diario,
yo utilizo servilletas de papel. Son reciclables, no tienes que lavarlas, plancharlas y todo eso. Ahora hay servilletas muy bonitas y buenas. Si decides hacerlas de tela corta cuadrados de 45 cm. de lado. Es la medida habitual.
¡Que aproveche!
Un saludo de Manuela.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Equipo básico para coser.


Para ponerse a coser (pongamos algo sencillo) por ejemplo, un mantel con sus seis servilletas.
  • Un costurero para guardar las cositas. (O una caja mona, así no hay que gastar nada).
  • Dos tijeras. Una pequeñita de punta muy fina y una grande (son caras pero imprescindibles) la marca "Palmera" es una de las mejores del mercado.
  • Agujas de dos o tres grosores distintos.
  • Un acerico con alfileres de acero.
  • Hilos acrílicos (son los mejores) para coser. Varios colores.
  • Hilos de algodón (baratos e imprescindibles para hilvanar). Blanco y negro es suficiente.
  • Jaboncillo de sastre, tiza o si me apuráis las "plastidecor" de vuestros hijos.
  • Cinta métrica.
Si vais a comenzar a coser por primera vez os aconsejo que elijáis una tela que no sea demasiado delicada ni demasiado cara. Un tejido de algodón con la trama visible (es decir, que se vean los hilos de la tela) Un buen truco es ver si se deshilacha mucho. Esto será buen síntoma.

Antes de coser, es aconsejable lavar la tela. Muchas veces encoge y esto destruiría todo el trabajo una vez hecho. Cuando esté lavada ya no encogerá más.

Para aseguraros de que está cortado recto, sacad un hilo desde un extremo con cuidado. Cuando haya salido entero, tendréis una línea perfectamente recta. Haced igual en los cuatro laterales y estará cuadrado perfectamente. Ya se puede cortar la tela por la marca que ha dejado el hueco del hilo que se saca.
Si la trama de la tela no fuera recta (a veces pasa) tendréis que hacer dos laterales así , y los opuestos midiendo con la cinta métrica y haciendo marcas por donde cortar.

Con las servilletas seguir el mismo método.

Una vez cortado es importante sobrehilar (para que no se deshilache mientras lo manejamos) Este punto se puede hacer a máquina o a mano. Es un punto básico que explicaré en el próximo artículo junto con el hilvanado y el pespunte normal.

Una vez sobrehilado, se hace el dobladillo doblando la tela dos veces sobre sí misma y con un grosor de un cm. aproximadamente, se hilvana con puntadas largas y con hilo de algodón (luego se quita bien y fácil porque se parte).

Y ahora, con todos los contornos hilvanados, aconsejo la máquina de coser para terminar la labor, pero si no se dispone de una, no importa. A mano queda bien haciéndolo con cuidado. Las puntadas deben ser pequeñitas y procurando no traspasar demasiado la tela. Utilizad siempre el color más aproximado de la tela. Quedará mejor.
A veces combinar dos colores de tela resulta precioso. Uno liso y otro estampado haciendo contraste.

Como remate, la plancha. Un buen planchado de la tela hace milagros. Sobre todo cuando se hacen prendas de ropa.
Venga, a estrenar ese mantel con una buena comida.

Un saludo de Manuela.