Aprovechar un cuadro que ya no quiero.

Cuando hemos gastado mucho dinero en un marco caro y resulta que el motivo que enmarcamos en su día ha pasado de moda o nos hemos cansado de él o , simplemente, ya nos nos gusta, no es necesario tirar el cuadro entero.
Podemos aprovechar ese marco poniendo nosotros mismos otro motivo.
Os enseño una idea para hacerlo.

Tenía un cuadro grande que ya no quería y corté la parte trasera (que es de papel) con un cutter y saqué el motivo que no quería conservar.
Como no tenía ninguna lámina ni dibujo que encajara exactamente con el tamaño. Lo hice al revés, yo me adapté al tamaño del marco y del cristal.

Materiales que necesitas para este trabajo:

• Papel de arroz (es un papel semi transparente que encontrarás en todas las tiendas de manualidades) (hay muchísimas clases, yo elegí este de color crudo y semi transparente como con nudos)
• cola blanca (rebajada con agua a la mitad, la misma cantidad de cola que de agua)
• un pincel o paletina para extender la cola.
• Unas flores recortadas de un pliego de papel que también encontré en tienda de manualidades.
• tijeras y cutter

Primero hay que tener muy claro cómo quieres distribuir la decoración directamente sobre el cristal del marco.
Cuando estéis seguros de cómo poner, en este caso, las flores, se pegan directamente al cristal con la cola blanca. Una vez seco se pega el papel de arroz sobre las flores. Al ser un papel con transparencias, el efecto es muy bonito.
El papel de arroz no es nada delicado. Se maneja muy bien y se pega muy bien. No da problemas, en contra de lo que pudiera parecer.

Colocar el cristal y volver a colocar la sujección original del marco. (clavitos o grapas).
El marco ha quedado intacto para volver a cambiarlo cuando deseéis. No ocurre lo mismo con el cristal, que tendrías que cambiarlo para poner otro motivo.

Muy facil y muy resultón.
El límite, ya sabéis, vuestra imaginación.
Esto sólo es una idea.

Un saludo de Manuela.